Hay veces en las que, aunque necesitamos separar ambientes, la habitación de la que estamos hablando es muy pequeña como para permitirnos poner algún recurso estructural como las persianas de las que ya os habíamos hablado o una mampara.
En estos casos lo mejor para diferenciar las zonas lo mejor es utilizar los propios muebles.
Les puedo dejar algunos ejemplos:
A. Colocar una librería sin trasera como la separación de la zona de lectura o despacho y el salón
B. Utilizar la parte trasera del sillón para separar el salón del comedor: una opción que corresponde a la imagen de arriba, ideal para salones amplios que queramos separar del comedor.
C. Colocar dos alfombras diferenciadas en cada una de las zonas
D. Una lámpara o una maceta grande junto a la trasera de una mesa.
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