25 de septiembre de 2008

LA SEMANA DEL FENG SHUI, PARTE IV: Influencia del ambiente en el niño

Los niños desde que son concebidos reciben la influencia de su entorno. Cuando viven en el útero materno, aquella influencia se basa directamente en la madre, sus emociones y pensamientos lo afectan inevitablemente. Desde el momento que viene al mundo, este lo recibe con una oleada de sensaciones nuevas para él, de manera que como padres, es nuestro deber protegerlo y estimularlo. La correcta aplicación del Feng Shui al decorar el ambiente infantil hace del entorno del niño, un lugar armonioso, no solo desde el punto de vista estético funcional, sino también, el punto de vista energético.
El niño desde que nace comienza a explorar el mundo exterior, de manera gradual, constante y a pasos agigantados. En el cuadro siguiente se sintetiza la exploración del niño y los factores que la fomentan. RELACION CON EL MUNDO
0 - 18 meses Los sentidos se despiertan
18 meses a 3 años Adquisición de lenguaje y fantasía
3 a 6 años Autocontrol, razón


Los niños son muy proclives a ser influenciados por la energía. Dicha energía es conocida como CHI. El Feng Shui busca el equilibrio de la energía de manera perfecta tal como el Yin y Yang, cuyos componentes opuestos se encuentran en total equilibrio y llevan la semilla del otro en su interior.
El Feng Shui enseña que el buen chi reside en la forma como son estimuladas las percepciones. Dichas percepciones no deben ser bloqueadas ni confundidas. En la casa de una familia con niños pequeños, es imperativo que el chi circule armoniosamente. Si el chi se estanca, o corre de manera lenta, se envilece y resta vitalidad. Pero si fluye demasiado rápido, produce desconcentración y nerviosismo. Ambos casos afectan enormemente a bebés, párvulos e infantes, incluso a adolescentes, volviéndose retraídos y/o rebeldes. Si en un ambiente se desequilibra hacia un polo del chi (yin = negativo o yang = positivo), habrá un desequilibrio. En el cuadro siguiente se ilustra las manifestaciones del Yin y el Yang en una casa con niños pequeños.
HABITACIONES y OBJETOS
YIN
Áreas de poca luz Pasillos Habitaciones atiborradas Habitaciones vacías Silencio* Temperaturas frías Habitaciones alfombradas Ausencia de materiales brillantes Ventanas pequeñas, claraboyas.


YANG
Áreas muy iluminadas Juguetes que incitan movimiento Ventanas sin revestir Mascotas Pisos muy brillantes Formas repetitivas Muebles de distintos tamaños Camas altas Paredes con pinturas satinadas Ventanales, ventanas múltiples.

* Hay madres de bebés recién nacidos que tienen la costumbre, de hacer mucho silencio y apagar las luces para evitar que se despierte. Esta práctica no es recomendable desde el punto de vista energético.

1 comentario:

Anónimo dijo...

Felicitaciones...muy interesante tu publicación, es muy importante el manejo de la energía en e lespacio y sobretodo aplicarlo en los mas pequeños, asi mejoramos su desarrollo...gracias